EL SECUESTRO DE TOMÁS

Hace unos días vi una noticia sobre un secuestro, a una mujer le habían secuestrado el perro. Y ella decidió rescatarlo de sus captores.
“suena el teléfono, al otro lado del auricular una voz distorsionada comienza a hablar:
- Tenemos a “cookie” en nuestro poder, si quiere volver a verlo, siga mis… nuestras, nuestras que somos muchos ¡eh!- el secuestrador sigue con sus peticiones- quiero… digo queremos más chocolate para el desayuno y…quiero decir que le dé a su hijo más chocolate para desayu…¡ hay, deja de lamerme!
- Manolito. ¿eres tú?
Bueno en el caso real la situación es bastante más seria. A la mujer le secuestran al perro y unos días después descubre, por el chivatazo de una amiga, donde está. Está en un hospital, y va a ser utilizado para las prácticas de los alumnos de medicina.
La dueña de Tomás, que así se llama el perro, decide disfrazarse de enfermera para rescatar a su fiel mascota, y de esta manera, como si de una película de espías se tratara, rescata a su perro, el cual ya estaba atado, drogado y a punto de diseccionarlo por un grupo de estudiantes. Tomás pudo ser rescatado, pero el resto de perros que se encontraban en otras mesas con sus respectivos “verdugos” no corrieron su suerte.
La mujer fue denunciada por la universidad por robar material de laboratorio.
“material de laboratorio”. Esa es la definición que la universidad les da a los perros.

alimentos transgénicos (monopolio)

Sandías sin pepitas. Esta misma tarde he leído un cartel publicitario en el que me intentaban vender las ventajas de este tipo de sandías. Me he quedado estupefacto. No por la sandía en sí, que ya sabía de su existencia, si no del hecho de que intenten venderla como la panacea.
- Los niños ya no tendrán problemas a la hora de comérsela. No se atragantarán con ninguna pepita.
- Pero oiga eso es estupendo, ¿y para cultivarlas?
- ¿cultivarlas?- continua el hombre sonriente- de eso ya no tiene que preocuparse, nuestra empresa las distribuye por todo el mundo.
- Ya, pero yo tengo un pequeño huerto y…
Y es aquí donde radica el problema. No porque yo quiera, o no, cultivarlas, si no porque no tengo la posibilidad de hacerlo. Ya que al quitarle las pepitas están dejando sin simiente a esta fruta.
- Pero eso es una menudencia, yo no voy a cultivar.- podría decir más de uno.
- Además en el caso de querer, me basta con pedir semillas de este tipo a la empresa.- contestarían otros.
Sí, todo eso es cierto, pero vayamos por partes; en primer lugar puede que no vayas a cultivar nunca, vas al mercado de turno y compras y con eso te basta. Pero ahora supongamos que eres el vendedor, y tienes campos de cultivo en los que cultivas estas plantas y los clientes te piden que sean sin pepitas. Pues nada vas a la empresa que tiene la patente de este alimento transgénico y le compras semillas al precio que ellos quieran. Y cada vez hay más gente que quiere este tipo de alimento, por pereza (por no quitarle uno mismo las pepitas), comodidad, etc. Llega un momento en el que este vendedor, si quiere vender, ya no le bastará con recolectar y quedarse con simiente para la siguiente cosecha, ya que estas sandías no tienen semillas. Tendrá que acudir nuevamente a la empresa y comprar más.
Esto es un intento de controlar los alimentos, lo que hasta ahora era una planta que cualquiera podía cultivar, ahora hay que pagar a una empresa los derechos de la patente para poder hacerlo, o bien comprarle directamente a ellos las semillas.

un hombre mantiene relaciones con un erizo

Ya sé que esta entrada está en mi otro blog(mejorquelavida.blogspot.com). pero creo que es más acertado ponerla en este.

Un hombre mantiene relaciones con un erizo.
No, no se trata de un amor prohibido que haya surgido por las flechas traicioneras del vil Cupido.

- ¡Oh!. ¿Pero que es esto que siento? Mi corazón palpita cuando estás cerca. Con esa mirada enigmática, ese pelo salvaje.

Tampoco se trata del típico promiscuo de nariz grande y mandíbula cuadrada que se cepilla a todo lo que se menea.

- no puede ser. ¡Cómo se contonea! ¡Que sexy! Esos pinchos me ponen a cien. Si sigue así voy a hacer una locura.

Aquí teneis una foto del amante.

Como podeis observar se le vé avergonzado. aparta la mirada y se niega a hacer comentarios públicos a los medios de comunicación.Parece ser que el individuo en cuestión, el hombre no el erizo, tenía ciertos problemas de eyaculación precoz (después de esto creo el problema va a ser eyacular), por lo que decidió consultar con las personas más indicadas en este caso ¡¡ A una especie de curandero!! No, no se le ocurrió ir al médico. Dejemos una cosa clara, si a un hombre le da por follarse a un erizo está claro que algo no funciona en su cabeza, con lo que ir al médico ni por asomo se le pasó por la cabeza. Bueno sí, si se le pasó, pero parece ser que le daba vergüenza. ¡ Vergüenza! Jé, pues no me quiero ni imaginar la cara que tiene que haber puesto cuando lo hayan visto después de su exótica relación.

- Doctor, doctor.
- ¿Qué sucede? ¡Dios mío! ¿Qué le ha pasado?
- Esto, verá, yo... bueno... él... uffff, he tenido relaciones. Bueno, no exactamente relaciones con un erizo.
- Cuándo dice "no exactamente relaciones" ¿quiere decir que antes no le ha invitado a una copa? Enfermera aleje la jaula del loro, ya sabe que es muy coqueto y no es bueno provocar al paciente.
Después del "accidente" el hombre ha declarado que lo que más le preocupa es lo que opinará su novia.Los médicos se están cuestionando en estos momentos si se refiere al erizo en cuestión o a una mujer.Y si se trata de una mujer ¿cómo se tomará esta infidelidad? ¿Se irá con un burro para vengarse?

- Te dejo. Me marcho con Asno. Él llena ese vacío que siempre dejaste en mí.

¿O lo dejará por ser tan sumamente idiot... ? Aunque puede que lo perdone y los tres vivan una relación maravillosa.Para tranquilidad de los lectores he de decir que después de las debidas pruebas, se ha determinado que el erizo no está embarazado.